El Indicador Multidimensional de Calidad de Vida (IMCV) es una herramienta que se utiliza para analizar la calidad de vida de los habitantes de cada territorio. Este indicador tiene en cuenta nueve dimensiones para determinar la calidad de vida de cada lugar: condiciones materiales de vida, trabajo, educación, salud, ocio y relaciones sociales, seguridad, gobernanza y derechos básicos, entorno y medio ambiente y experiencia general de la vida.
En Castilla y León, el IMCV de 2020 superó los 101,787 puntos, pero descendió con respecto al máximo detectado por el INE, que es de 102,379 puntos. A pesar de este descenso, esta comunidad autónoma ha experimentado un incremento de algo más de tres puntos desde los 99,074 que marcaba diez años atrás, en 2011.
Si se analiza cada una de estas dimensiones, se puede observar que Castilla y León presenta registros ligeramente peores que la media estatal en salud, educación, gobernanza y derechos básicos y experiencia general de la vida. Por otro lado, presenta mejores registros que la media estatal en condiciones materiales de vida, trabajo, ocio y relaciones sociales, seguridad física y personal y entorno y medio ambiente.
En cuanto a la calidad de vida en el estado, ha mejorado en 2021 con respecto al año anterior, situándose en 101,83 puntos. Esta mejora ha sido impulsada por las dimensiones de educación y, en menor medida, de entorno y medio ambiente, mientras que las de salud, seguridad física y personal, trabajo y condiciones materiales de vida han empeorado su puntuación.
En cuanto a las comunidades autónomas que presentan los niveles más elevados de calidad de vida en 2021, destacan la Comunidad Foral de Navarra, La Rioja y Aragón. En el lado contrario, los registros más bajos se dieron en Andalucía, Canarias y Región de Murcia.
Si se analizan las nueve dimensiones por separado, se pueden destacar algunas comunidades autónomas que sobresalen en determinadas dimensiones. Por ejemplo, Euskadi destaca en las dimensiones de condiciones materiales de vida y educación, Illes Balears en gobernanza y derechos básicos y experiencia general de la vida y Aragón en trabajo.
Por su parte, la Comunidad de Madrid destaca en salud, el Principado de Asturias en seguridad física y personal, Cantabria en ocio y relaciones sociales y la Comunidad Foral de Navarra en entorno y medio ambiente.
El análisis de la calidad de vida en Castilla y León y en el estado en general muestra fortalezas y debilidades en diferentes dimensiones. Es importante seguir trabajando en mejorar aquellos aspectos que presentan una puntuación más baja y potenciar las fortalezas que ya existen para lograr un mayor bienestar para todos los habitantes del territorio.